Cuento: "No sé en qué momento"

24.08.2020

     -Y sí, yo siento que ha sido así, que empezó con esos días de lluvia en las guarderías de los centros comerciales, la vez que nos llamaron para apagar las cámaras y nos fuimos directo a la casa de la Soledad, de frente nos fuimos, hubieras visto, porque ese día nadie estaba bien, y mucho peor desde pues que nos llamaron por estar grabando en las guarderías. Supongo que habrían de ser las once de la noche cuando llegamos a casa de Soledad, primero porque ella decía que sus padres no estaban y nosotros nos fuimos caminando hasta su casa, que para el colmo estaba en el último piso de su edificio, eran como catorce creo yo. La cosa había sido de que boca a boca todos querían irse de lado o de frente a una fiesta, tu sabes que hay fiestas en todos lados por las calles aquí, pero no, al final prefirieron ir a la casa de Soledad y ella dijo que sí, que no había problema. No sé en qué momento se habían puesto a comprar vino y venían todos con bolsas, ya eran las once de la noche como te dije, y yo la verdad que tenía sueño. La cosa es que cuando llegamos los guardias ni preguntaron nada, nos dejaron entrar así como si nada, Soledad subió sola un ratito y luego bajó para hacernos subir a nosotros, todos con sus bolsas azules llenos de botellas con vino, quien sabe qué tipo de vinos habrá sido. Yo no tomé ese día, estaba sin duda cansado, creo que también me había afectado el hecho de que nos botaran de las guarderías, pero apenas entramos ya todos los demás empezaron a tomar, nomás yo estaba ahí en un rinconcito esperando a que me llegara un vaso, no quería tomar, y el vaso me llegó mucho después y me la trajo la misma Soledad, me dijo que tampoco podía tomar mucho ella ya que la casa era su responsabilidad, además de que la música no podían ponerla con mucho volumen y esas cosas. En todo caso, éramos solo dos grupitos, el otro donde estaban todos los demás tomando vasos enteros e incluso desde la botella misma y el grupito, que más bien era una diada de mi con Soledad, ella estaba un poco más mareada que yo sin duda y empezó a contarme lo de su vida pasada, yo apenas tenía una pequeña amistad con ella, pero ya sabes, la ocasión no estaba para seguir viendo como mis demás compañeros se alcoholizaban como si nada. Yo nomas escuché lo que me dijo ella sobre su anterior vida, o sea, ella es mayor que nosotros, dos años creo, ella empezó a estudiar nuestra carrera mucho después de salir de su colegio y fue justamente de su colegio de lo que me habló ¿comprendes? Me dijo que había tenido una infancia muy feliz y que sus padres se la habían arrebatado por cambiarle a un colegio adventista y ella al principio no quería ir, pero al final fue, tú sabes que ella no es religiosa ni nada de eso, pero dice que en la secundaria estaba muy inmiscuida en esas cosas que hacen las iglesias, les daban semanas de viajes para rezar y esas cosas dice, y que además en uno de esos tantos viajes la hicieron bautizar, o sea que ella es bautizada ahora, pero no es practicante. Lo que si me contó con lujo de detalle era lo de su primer novio, empezó contándome que conoció un chico en la secundaria, que era inteligente porque siempre andaba con sus libritos, ella decía que él era muy tímido y un poco cobarde a veces, siempre le molestaban por lo grande que era su cabello y los profesores no perdían oportunidad para recordarle que debía cortárselo, después de todo, era un colegio adventista, y empezaron a salir cuando ella le invito a un sábado a la iglesia, tú no sabes pero Soledad dice que los adventistas van a la iglesia los sábados, y dice que van bien vestidos, con sus corbatas y sus vestidos con faldas largas, con biblia en mano derecha, todo eso también me contó, me dijo que el chico aceptó su invitación y fue él mismo quien llamó a su puerta, como si fuera una cita de antaño, sus padres al principio no querían que ella estuviera con él, ya que no era religioso, no era bautizado tan siquiera, pero ella se perdió en esa manía, lo llevó a la iglesia, le presentó a todas sus amigas, ella dice que fueron unas dos o tres nomas y que además le presentó al pastor de la iglesia, que le había dicho a él todo un discurso sobre cómo se debería formarse un chico tan joven para ser hijo de dios y pregonar la palabra de Dios, si, como lo oyes, todo eso le dijo el padrecito, aunque creo que allá los adventistas no les dicen padrecitos, sino pastores, quien sabe el porqué. La cosa es que ella se fue empujando por el amor hacia él, y el como que le seguía el juego, llegaron a sentarse en la misma carpeta pasando medio año y sin embargo a ella no le era común que después de tanto tiempo juntos no habría pasado nada más que ser simples amigos. Contó también que años antes había tenido otra relación así tipo de amoríos con un compañero pero que no llegó a nada y todo el mundo se enteró de eso y la molestaban con ese chico de años anteriores, pero mientras ella se esforzaba en querer que los demás la molestasen con el nuevo chico de ese año nadie lo hacía. Le había dicho además que él tenía que bautizarse y este no aceptó pues, le dijo que debía leerse la biblia y él la leyó, no sé si todo ¿alguna vez has leído toda la biblia? Yo creo que ni los adventistas leen sus propias biblias. Sí, todo eso pasó en ese medio año, porque después ya todo fue diferente, una semana antes de eso, ella se ilusionó bastante, ya que a él sus padres le habían comprado una bicicleta y le llevaba a ella donde quería, manejaban por las tardes después del colegio, dice que él le enseño a manejar bicicleta y de hecho fue por eso que ella tiene una cicatriz en su mano derecha, tú debes preguntarte ¿Cómo te haces una cicatriz en la mano derecha aprendiendo a manejar una bicicleta? Lo mismo me pregunté yo, pero no le dije nada a ella, porque estaba feliz contando su historia. Continuó diciendo que esos últimos cinco días se estaban volviendo ya muy mejores amigos, que además él tenía la manía ya de sacarla de su casa, los sábados, o sea, ese último sábado nada más, porque era bien difícil pues que él tenga ganas siquiera de ir a la iglesia ¿tu irías a la iglesia? Yo creo que no, no aguantaría, yo no sirvo para esas cosas, por más que crea en Dios. Pero bueno, como iba diciendo, ella estaba ya por insinuarse, por decirle que él le gustaba y que se había enamorado, que por esos detalles de manejar bicicleta y no sé qué tanta cosa le quería decir que podían estar juntos, como pareja pues, aunque apenas hayan tenido...cuantos.... ¿quince años? Tal vez dieciséis, pero quien sabe, la cosa es que ella no se atrevió, y después de una semana él le contó que se había enamorado de otra chica. Si, así como lo oyes, él también había tenido la misma sensación de ella, pero con otra chica, que dice que era de la otra sección, que hace unas semanas estaban saliendo y también le había enseñado a manejar bicicleta, pero que la otra chica no tuvo cicatriz ni tampoco aprendió nunca, no como Soledad, que tu bien sabes que puede manejar bien la bicicleta, incluso mejor que nosotros, mejor que yo por lo menos ¿tu manejas bicicleta? Bueno, como iba diciendo, la cosa es que ya te imaginaras como es que le dolió a ella, lo peor no es eso, lo peor es que él le pidió a ella que le ayudara para poder estar con la otra chica, o sea con la chica de la otra sección, y pues ella le dijo que sí, pero al final se empezaron a alejar. Bueno, Soledad, no es de hablar mucho de estas cosas, pero ese día además de tomar estaba muy triste, la verdad es que en esos momentos los demás compañeros ya se estaba durmiendo, uno que otro nomas seguía y seguía dándole al vaso lleno de vino y seguían riéndose, quien sabe que habrán estado diciéndose en esos momentos, por eso Soledad se paró un rato y llevó a un par de compañeros a un cuarto, para que duerman ahí y no les pase nada, porque déjame decirte, estaban por el piso. Cuando Soledad regresó empezó contar de nuevo la historia, esta vez claro, con otro tono ya ves tú como es que para ella no fue fácil y que además quería que el ya no se acerque, que no venga los sábados, porque vino, al siguiente sábado vino, tocó la puerta, sus padres abrieron, y ella mintió diciendo que se sentía mal, cosa que no era cierto pero lo dijo así sin más y sus padres le tuvieron que pedir perdón al chico para que vaya solo el a la iglesia. Para el colmo además fue justo cuando todo sus compañeros y todo su salón empezaban a molestarlos, o sea justo cuando ya nada pasaba todos le hacían recordar con puras bromitas, todo eso que tuvo que pasar Soledad, bueno, yo no sé, pero eso debió ser también bien ridículo, como te dije, tenían apenas quince o dieciséis años, la cosa es que a ella le tuvieron que hacer su fiesta de cumpleaños, y todo su salón empezó a hacer los preparativos, bueno, tenemos que tener en cuenta también que en su salón habían a lo mucho unos veinticinco alumnos y descontábamos a los diez o nueve que no eran bautizados o creyentes tan siquiera. Sus profesores y pastores también pusieron dinero para ese tipo de cosas, claro, y hasta pusieron una casa sucia en donde iban a celebrarlo con no sé qué, después también lo de alquilar los ternos y los vestidos, porque eso sí, iba a ser como si fuera a ultima fiesta del año ya que era una buena excusa, pero bueno, quien sabe, la cosa es que le designaron pareja pues, y ya sabrás a quien eligieron para que sea su pareja de cumpleaños, no sé cómo le dicen, tienen un nombre bien raro, pero bueno, no importa, la cosa es que Soledad le dijo a sus padres que no quería esa fiesta, que bueno, no era verdad, ella si quería la fiesta, pero por eso de que él iba a ser su pareja no le gustaba, le parecía incómodo, además porque el ya había cortado toda relación con ella, aunque también él no había conseguido a la chica del otro grado que le gustaba, como dije pues, pero no estaba con nadie al fin y al cabo. La cosa es que, bueno, a ella y él les pusieron en un rincón de la casa, porque tenían que ensayar unos pasos para la entrada de la cumpleañera o algo así y estaban ahí incómodos sin hablarse por cuantas horas, ya te imaginarás, además de que tuvieron que ensayar mas de tres o cuatro días y eso habría sido prácticamente el infierno para ella. La cosa es que al final si se hablaron, se dijeron cosas como que porque ya no se juntaban o porque ya no salían en bicicleta, bueno, ese tipo de cosas, como pidiéndose perdón, pero ninguno habló de que se gustaban, o bueno, por lo menos ella no le dijo eso, yo asumo que no era para tanto, creo además que a él si le gustaba también Soledad, pero tampoco le dijo nada, conversaron, como si nada de eso habría pasado, como si fuera como esos días de antes cuando eran muy buenos amigos, pero había una cosa, y es que esta vez eran los últimos días de su colegio, ya después de eso no se volverían a ver, esa es la cuestión. Bueno, en si lo que pasó el día exacto de su cumpleaños fue que ninguno de los dos se apareció, él tuvo la costumbre de decirle que salga de su casa media hora antes de lo que estaba pactado, para que la llevara a ver como tenía que ir el con el terno y esas cosas, puras mentiras, porque el nomas la llevó a caminar, ella no quiere contar de que hablaron ese día, pero estuvieron caminando hasta muy entrada la tarde dice, y que no se aparecieron en su propia fiesta, ni la cumpleañera ni la pareja de ella, ya te imaginarás la que se armó, pero bueno, no me consta, pudieron pasar muchas cosas por ese suceso tan simple, pero bueno, ella dice que él la deja a una cuadra de su casa y mientras ella entraba en su casa él la despedía con una brazo levantado, después ya no se acuerda que pasó, obviamente sus padres le gritaron por no aparecerse, ella se inventó una excusa pero igual la castigaron, y el sábado siguiente él vino a tocarle la puerta, no para ir a la iglesia, sino para despedirse para siempre, él ya se iba a otra ciudad, de ese colegio adventista y de su amistad. Fue la última vez que lo vio. Y eso me contó, solo esa porque después ya tuvo que acompañar a los demás a tomar un taxi para que se vayan a su casa, yo también me fui después de eso, supongo que solo me contó esa historia porque estaba un poco mareada, tal vez y así sobria no me hubiera contado nunca jamás todas esas cosas, pero bueno... ¿eso querías saber?

     -Yo no te pregunté nada.


-Dany Chirme-


¡Crea tu página web gratis! Esta página web fue creada con Webnode. Crea tu propia web gratis hoy mismo! Comenzar